Election

«Después de vuestra admisión, vais a jurar que si uno de los miembros de la Fraternidad se hallara ante graves dificultades lo salvaríais fielmente y de modo totalmente desinteresado. Si no lo hicierais, que vuestro cuerpo sea descuartizado en miles de trozos por innumerables cuchillos.»

Juramento de las triadas 

Siempre me he sentido atraído por el cine oriental, no sé si mi afición viene de los tiempos en los que de chaval alucinaba con las peleas de artes marciales que nos ofrecía el cine de Hong Kong, o de los viejos cómics de Artes marciales de la Marvel en los que los protagonistas tenían una clara vinculación con lo oriental como sucedía con Shang Chi o Puño de Hierro.

Me parecen espectaculares las películas de John Woo, me encanta el homenaje que realiza Quentin Tarantino a este tipo de cine (que sólo hemos podido degustar a base de alquilarlo en los video clubs) en Kill Bill. Así, Election también es cine made in Hong Kong, con temática centrada en el mundo de los gángsters chinos, pero no es una película de acción, sino que es el retrato de las triadas que entroncan con antiguas tradiciones chinas. Estas bandas que controlan los más diversos negocios ilegales en Hong Kong se estructuran como familias que son dirigidas por un jefe elegido democráticamente entre sus miembros. La tradición y el sentido del honor exigen que los miembros de estas triadas respeten las reglas del juego.

Pero ¿qué sucede cuando alguien desea tanto el poder que se salta todas las reglas? ¿qué pasa cuando alguien quiere saltarse esas normas democráticas y quiere imponerse mediante la violencia y el soborno? Ese es el enfrentamiento que nos narra este interesante film, en el que vemos una despiadada lucha por el poder representado por un cetro de madera con cabeza de dragón. Aquel que lo detente dirigirá las triadas, será su presidente, y pasará a formar parte de los grandes jefes mafiosos. Toda esta trama sirve para hacer un análisis del poder, y del miserable comportamiento humano para hacerse con él. Los matones que sirven a cada jefe son meros peones totalmente sacrificables en ese absurdo juego de poder, en el que la lealtad es el instrumento de dominación y de manipulación que justifica el dar la vida por la causa. El fin justifica los medios, todo está permitido para mantenerse en el poder y no ser descabalgado por el rival.

Esta es la temática de esta interesante película, que si bien tiene algunos baches en cuanto a su ritmo, y adolece de cierta frialdad, sí que es un buen ejemplo del cine que se realiza en Hong Kong y que nada tiene que envidiar de muchos productos hollywoodienses que inundan nuestras carteleras. Es una lástima que esta película se exhibiese en tan pocos cines, y que la vieran tan pocas personas, pero es lo de siempre, película oriental, sin actores conocidos, sin el apoyo de una gran multinacional,…relegada al ostracismo.

Ficha técnica: Election – Director: Johnny To – País : Hong Kong – Año: 2005